Que sucede cuando no hacemos un implante
A medida que pasa el tiempo y vamos sumando años nuestra dentadura se resiente. Entre todos los problemas buco dentales que puedes tener, uno de los más comunes es, sin duda, la perdida de piezas o dientes.
Aunque sea algo común, no deja de ser una reacción a una patología en nuestra boca, por lo que debemos asumir esto como un problema a tratar. Cuanto antes se analice el origen del problema, menores serán las repercusiones para tu boca y tu salud.
Vamos a ver cuales son los motivos por los que puedes perder una pieza y porqué es tan importante que, una vez realizada la extracción, esa pieza se reemplace por otra.
La caída de los “dientes de leche”
Antes de todo, debemos entender que un diente solo se cae de manera natural cuando tenemos una edad de entre 6 y 12 años. Esta es una perdida normal y que, fuera de casos especiales, se producs en todas las personas.
Motivos por los que caen piezas dentales
Las causas pueden ser diversas, pero sin duda, una de las más comunes y con la que tenemos mucha experiencia es la gingivitis, la periodontitis o caries.
Gingivitis
Es cuando el problema se localiza en la encía. El motivo más común de esta patología es, sin duda, la acumulación de sarro entre el diente y la misma encía.
El efecto más visible de que padecemos este problema es el sangrado de las encías, no obstante, esto no es un problema que aparezca de golpe (ya que la acumulación del sarro es un proceso muy lento y requiere de mucho tiempo).
Periodontitis.
Si la gingivitis es el aviso de que algo esta pasando, la periodontitis es la alerta de que los dientes afectados pueden estar en grave peligro.
Esta patología es la continuación natural a la gingivitis cuando esta no ha sido tratada y el sarro se ha acumulado entre el diente de manera continuada. En este punto los síntomas ya no son solo sangre en la encía, a demás existe un movimiento de la pieza afectada que puede terminar en la caída de esta.
Caries
Por último, tenemos las caries, que es sin duda otro de los casos más comunes. Si esta es leve, la solución es un empaste en la pieza para evitar que esta se extienda por el diente, pero, cuando la caries es demasiado severa y esta llegando al nervio del diente se tienen 2 salida: la endodoncia o la extracción del diente.
¿Por qué es importante un implante dental?
Llegados a este punto, con la extracción del diente ya hecha, debemos plantearnos el poner una pieza de repuesto para cubrir la zona de la encía que ha quedado al descubierto. Si esto no se hiciera, podríamos tener una serie de problemas bucodentalesque requerían de atención por parte la clínica, lo que supondría para el paciente una pérdida de dinero, salud y tiempo importante. Los 2 problemas principales son:
Movimiento en a la dentadura. Cuando aparece un hueco en la encía se genera un movimiento natural de los dientes adyacentes hacia esa zona. Esto, a la larga, provoca que los dientes no encajen al cerrar la mandíbula y qué a su vez, puede generar molestias musculares, dolores de cabeza y desgaste en el esmalte.
Desgaste localizado. Cuando falta una pieza en la boca, tendemos a masticar por el lado opuesto al hueco, ya que, dependiendo de la textura de la comida, podría daña la parte de la encía expuesta. Esto genera un desgasta mayor de las piezas de ese lado, por lo que existiría una mayor posibilidad de sarro (gingivitis) y desgaste del esmalte (caries).